Ser y parecer.

Estos días tengo que "entretener" a mucha gente como parte de mi trabajo. Y por algún tipo de reacción, vuelvo a pensar cómo me ven los demás. No sé, no es algo que me resulte fácil, ver realmente como parece que soy aparte de lo muy obvio: muy tímida y tremendamente nerviosa. Pero incluso lo de tímida se puede interpretar de muchas maneras: fría, distante... Conversando entre desconocidos o personas con las que he tenido muy poca relación pero que sin embargo han oído hablar de mí me suelo llevar sorpresas, pero lo curioso es que más se las suelen llevar ellos: esperan encontrarse con alguien al que no siempre "encuentran". O si van buscando un "bicho raro" se tropiezan con otro de otra categoría. Y si lo que se juntan son personas que me conocen por motivos diferentes: aún se complica más la cosa, debo ser experta en mil caras. Siempre he pensado que esto ocurre porque tendemos a encasillar a la gente y formar un todo a partir de unas ideas: como si la personalidad fuera con el paquete completo sin muchas variaciones posibles. Y no es así: simplificar a las personas podrá ser la solución más fácil para intentar entenderlas pero lleva a muchos errores. Y una persona callada tranquila bien puede haber recorrido el mundo en solitario; alguien muy friki o muy ratoncito puede disfrutar divirtiéndose como el que más, se podrían poner tantos ejemplos.

Recuerdo en mi época de estudiante, viajes diarios de Zamora a Salamanca en autocar en compañía de otro chico que estudiaba en una facultad cercana y era amigo de uno de mis mejores amigos. Un día nos encontramos los tres por la calle y los dos intentaron presentarme al otro. Resultó que habían hablado bastante de mí, pero nunca a mi amigo se le había ocurrido identificarme como la chica que viajaba todos los días con su amigo. Y eso que él sabía que yo cogía ese autocar todos los días, dónde estudiaba... Cosas curiosas.

En fin, un poliedro con tantas caras tiende a ser una esfera....

Odio la Navidad

Y hoy sí que me estoy sintiendo mal.

Anestesia visual

No sé si la vista se acostumbra o si se trata de algún tipo de anestesia causada por el tiempo: este año casi ni me he dado cuenta de la decoración navideña de la oficina con esas deliciosas columnas jónicas rodeadas amorosamente de espumillón. Ha sido hoy cuando las he visto de verdad (ahí está mi capacidad de observación) mientras que mi primera vez el corazón casi se me salió de la impresión. Este año, poco más que indiferencia. Pero si puedo acostumbrarme a esto, ¿no es hora ya de que salga corriendo de aquí?

Madrid desierto

Un día normal. O casi. He salido de casa después de comer, de vuelta al trabajo. He caminado más de 5 minutos sin encontrarme a nadie. El cielo estaba gris, muy oscuro, amenazante. Caían pequeñas gotitas sobre la calzada. No se oía el más mínimo ruido, me forzaba a escuchar el sonido del agua y olvidar el de mis pisadas: ya no era mi barrio, el silencio me estaba asustando, parecía el presagio de algo ominoso, me sentía dentro de una película de terror. Casi quería correr, escapar de allí.

Y di la vuelta a la esquina. Llegué a mi parada de metro, sentí el tráfico, el bullicio de siempre,los empujones. La imagen se hizo añicos y tuve que volver a la vida real.

Casi Nochebuena

Esta tarde no me apetece nada trabajar y menos meterme en carretera nada más salir para sufrir el atasco; casi no me parece ni Nochebuena sino un fin de semana normal en el que trabajo el viernes hasta tarde, engancho dirección Salamanca para volver otra vez a Madrid el domingo por la tarde. No voy a notar mucha diferencia :(

Sigo sin ordenador (me trajeron una placa equivocada): en lugar de poder hacer más cosas en el tiempo que me queda libre en teoría me siento más limitada. ¿Leo más? Tal vez... pero hablamos de ratos pequeños que dan para unas pocas páginas. Los ratos más largos no han cambiado, no abundan tanto con las largas jornadas laborales.

Ya tuve mis primeros regalitos: un puzzle gigante de Totoro, un peluche extraterrestre y una funda para la Ds con Mario y Yoshi colgando. Y sé que por ahí hay algún paquete de la Fnac todavía esperando ;)

Pero la Navidad me sigue poniendo triste :( Y mi sobrina está con sus abuelos de Zaragoza

La importancia del aspecto exterior o cómo no conseguir nunca llevar buena pinta.

No me gusta el título, pero al igual que no consigo habitualmente tener el aspecto “correcto”, los títulos o presentaciones tampoco se me dan muy bien.

A veces sí que me gustaría ir bien arregladita o al menos no parecer tan hippie sin ni siquiera pretenderlo. Creo que me abriría algunas puertas y al menos dejaría de ser la niña y me mirarían de forma más seria.

Claro que si voy a una entrevista de trabajo o a una reunión importante puedo embutirme en un traje y conseguir una presencia más o menos formal. Pero me refiero al día a día. No creo que haya nacido para ello, ni siquiera tengo el menor talento para conjuntar ropas, peinarme...más bien soy un puro desastre. Y de pintarme no hablemos, si tengo dos malos recuerdos de mis tiempos de azafata son el dichoso carrito con la comida ( en mi imaginación aún sigue pesando y en alguna pesadilla lo arrastro eternamente sin ayuda) y los continuos comentarios sobre mi maquillaje y mi pelo rebelde. Esos pelos de bruja por mucho que me peine pero que tienen vida propia.

Admiro a quien puede salir de casa impecable y mantenerse todo el día así: pero ¿de dónde sale el tiempo? Yo no lo encuentro por ningún lado... si me falta para hacer las cosas que realmente me importan, cómo voy a encontrarlo para tantas rutinas que se suponen necesarias. Ya necesitaría que los días tuvieran alguna hora más... ¿cuánto supondría a lo largo del tiempo robar esos minutos diarios? Ya voy a la peluquería varias veces al año, cuando veo que mi ropa se vuelve demasiado vieja me voy de compras y a la fuerza renuevo mi vestuario aunque odie probarme cosas.

¿Conseguiría algo si me esforzara realmente? ¿Merecería la pena? ¿Y a qué coste? No es que pretenda parecer pija ni mucho menos pero no ir hecha un desastre continuamente. ¿Superior a mis fuerzas? Me temo que sí

Y dicho esto ...desde ahora se me podrá confundir con un mendigo con sus harapos.

Dependencia/ adicción

Mi ordenador, que ya es un poco viejito, decidió la semana pasada, por su cuenta y riesgo un “no va más señores”. No es la primera vez que se declara en huelga o de baja por enfermedad pero cada vez los períodos de funcionamiento fluido se acortan y esta vez no respondió a varios boca a boca hasta que casi lo había destinado al asilo. Revivió, aunque su salud es muy frágil y me asusta que se duerma (apagarlo) porque no sé si volvería a despertar. Y además el proceso es cada vez más engorroso, se necesitan varios formateos consecutivos, reconoce las imágenes cuando le da la gana y demás achaques que indican que la decisión de jubilarlo sería la más sabia.

Mientras me peleaba con él he tenido que pasar varios días con síndrome de abstinencia. Al levantarme por la mañana, mis gestos automáticos son poner a hervir el agua de mi café (mi pequeña hervidora, otro de mis caprichos), encender el monitor para ponerme al día y enchufar la PDA para “tener material fresco” para mi viaje en metro... Hasta que me daba cuenta si estaba lo suficientemente adormilada que mi ordenador ya no existía.... Tenía que encender la radio o la televisión para poder enterarme de las últimas noticias, que no estaban personalizadas a mi gusto, por supuesto....(ni incluían blogs)

Y así podría seguir durante todo el día. Me decían que si ya paso toda mi jornada de trabajo delante del ordenador tampoco podía echarlo tanto de menos. Y aunque muchas veces la PDA ha sido una sustituta capaz (gracias también a mi vecino por su red abierta...) seguía “necesitando” mi ordenador para muchas pequeñas cosas: en vacaciones tal vez podré desconectar y vivir sin él algún tiempo pero para el día a día ya es para mí tan importante como el agua, la electricidad, tantas cosas que damos por descontado en una casa y que sólo pensamos en ellas cuando ocurre algo y nos faltan.

Definitivamente incluyo a los ordenadores en esa categoría y no porque necesariamente me pase pegada al monitor desde que llego a casa hasta que me acuesto (idea que tienen de mí muchos compañeros de trabajo) sino porque está ahí disponible para solucionarme cualquier problema (escuchar música, jugar, hablar con alguien, resolver una duda, pedir una pizza o buscar una receta de cocina, enterarme de las últimas noticias o comprar ese libro que no hay manera de encontrar en las estanterías de la Fnac pero que milagrosamente sí aparece en la página fnac.es) Y así ejemplos saldrían a miles...no he puesto nada supuestamente friki. El ordenador ya es un elemento de la vida diaria, uno más y un todo en uno.

Así que ahora mismo examino presupuestos mientras cruzo los dedos para que sobreviva unos días más....

Reproductor MP3 de Hello Kitty

Y el capricho de hoy es...
(después de dos días completamente congelada en la oficina ya ni siento los dedos: necesito calefacción ya. Mientras tanto me relajaré pensando en lo que podría comprar si alguna vez visitara Japón... ¿sería mayor el presupuesto del viaje en sí o de los "recuerdos"?

Son cosas de la edad

No sé si pesan los años o los kilos, si es la edad, la mala forma o el exceso de trabajo, pero cada vez estoy más cansada. También puedo echarle la culpa a la gran ciudad, todo el día corriendo de un lado para otro.

Esta mañana ni siquiera consigo recordar si oí el despertador, lo apagué y me dí media vuelta, o qué fue lo que realmente pasó. Sospecho que sí, porque pocos minutos después de la hora habitual me incorporé en la cama de un salto, sin todavía estar despierta ni consciente de nada.

Llevo una semana bastante agitada y con alguna salida nocturna, pero antes aguantaba mucho más. Si yo era la que siempre mantenía que la primera noche sin dormir no se notaba mucho y se arreglaba con algo de café, que er a partir de la segunda consecutiva sin acostarse cuando elcuerpo protestaba. Y aquí estoy, toda la semana para el arrastre.

Al volver del verano estuve tomando vitaminas, buscando culpables en mi alimentación desordenada: pizzas y chocolate, además de estar haciendome engordar (ya está, otro problema que nunca había tenido), me estaban debilitando. Y es más fácil tomar unas pastillitas que cambiar de vida...

Mientras, cierta persona me llama Bridget (al menos no fumo)

Llega el fin de semana y quisiera que mis planes fueran dormir. Pero de momento ya tengo un ordenador al que el disco duro ha dicho no va más, compras que hacer, limpiar la casa en algún momento, una visita a la Plaza Mayor el domingo, Animadrid que me hacía ilusión ir, y Harry Potter que seguro que lo tengo que dejar para más adelante. Mejor no pensar en libros esperando porque si me tumbo en el sofa, caeré muerta.

La tarde será larga y poco productiva, pero es lo que les gusta aquí. Cumplo órdenes.

Ofertas de trabajo

Parece que se despeja un poco mi futuro laboral, aunque tampoco lo aseguraría fervientemente. Hay cambios continuos pero definitivamente debería desaparecer todo en febrero, con lo que estaría en la calle.

Por lo tanto, la búsqueda de trabajo es ya inminente. Hay más o menos 2 posibilidades: infojobs o contactos. A través de infojobs podría, en teoría, buscar y decidir el tipo de trabajo que quiero hacer, encontrar mi trabajo ideal, enviar mi Cv y cruzar los dedos para que me cojan. Donde digo infojobs se puede sustituir por cualquier otro portal de empleo, pero éste es el que tiene una base de datos más amplia.

Por otro lado están los contactos, que no quiere decir obligatoriamente enchufes, sino personas con las que me relaciono por motivos laborales.

Ventajas e inconvenientes: el tipo de trabajos al que puedo acceder así es más bien limitado (no tengo tantos contactos), no estoy eligiendo el trabajo sino que el trabajo me elige a mí.

Pero por otra parte suelen ser puestos que ni siquiera llegarán a anunciarse o a los que en un proceso de selección normal no podría optar.

Me han llegado algunos y finalmente esta semana la empresa de mi actual jefe también me ha hecho su propuesta para que me vaya con ellos cuando la situación actual se resuelva de alguna manera. Aún no sé si quiero,no he dicho ni sí ni no, la ventaja que tengo es que tengo tiempo para pensarmelo. La oferta es que me ocupe del departamento internacional y de la página web, dos cosas que quieren potenciar. Es mejor oferta de lo que esperaba, aunque no se ha hablado de dinero. Creen que lo puedo hacer perfectamente, casi lo han creado expresamente para mí: han estado pensando en lo que yo les podría aportar y decidieron que en esas áreas necesitan y yo puedo dar (un planteamiento que tengo que reconocer que me gusta y también me asusta, ¿daré la talla?)

Pero no estoy segura, el ambiente de la empresa no me acaba de convencer en algunos departamentos y tampoco sé si el tipo de trabajo es lo que quiero de verdad. He hecho ya tantas cosas distintas que por probar una más no pasaría nada, y me interesa más que el resto de lo que me han ofrecido últimamente. Sólo que me da miedo encerrarme en algo que no es realmente lo que quiero de verdad y llegará un momento en que no pueda optar a otras salidas.

Necesito pensar.

La gripe está pudiendo conmigo

Fiebre.Frío.LLuvia.Cansancio. Siento que me está derrotando, me duele todo y no tengo ni energías ni ganas para hacer nada. El tiempo acompaña y me gustaría poder quedarme en casa, en la cama calentita. No es el momento.

1-0 para la gripe...

Postcrossing...

Hace unos pocos días he descubierto el postcrossing (creo que lo leí aquí) , y he ido de cabeza a probarlo (nadie que me conozca se extrañaría, por un lado me encanta probar todo lo que descubro y además éste es un tema que me interesa especialmente).

Es una mezcla entre el bookcrossing y los clásicos penpal de mi época de estudiante. El mecanismo es muy simple: envías una postal a algún lugar del mundo y a cambio te llegará otra de otro diferente. ¡Por qué no lo habré inventado yo!

Ya no tengo tiempo de escribir largas cartas pero si tengo un ratito para enviar una postal, voy a la página y pido una dirección. Cuando mi postal llegue a su destino seré yo la que esté en la cola y mi dirección será enviada a alguien. Y a esperar la sorpresa... Me encanta recibir cosas de otros países, descubrir algo más en mi buzón y añadir material a mis colecciones. Sólo me falta el tiempo para dedicarle pero este sistema me ha convencido.

Ahora a esperar las postales...

P.D. Esto parece un anuncio ;)

Si ya lo sabía yo...

Aunque más que nerds ya discuten después del test que deben referirse a geeks no sé si me quedo más tranquila ;)

PD En el friki test español no puntúo tan alto...

Adios a mi habitación

Mis padres han vendido su casa. Una vez más. Después se quejarán y dirán que viajo mucho, que cambio de ciudad y de país, pero desde pequeñita ha vivido ya en muchas casas. Voy a echar de menos esta habitación aunque ya no viva en ella, aunque sólo pase allí algún fin de semana, aunque haya echado de menos tantas otras.

Si alguien (Max Aub) dijo que eres de la ciudad en la que viviste tu bachillerato, y en mi caso al menos esto parece ser cierto, también la ciudad de tus años universitarios deja su marca. Y esta habitación corresponde a esos años. Trae muchos recuerdos.

Todo el mundo me considera ahora zamorana o salmantina, aunque haya vivido en otras ciudades nunca será lo mismo. Y nunca creo que me llegue a considerar madrileña,por muchos años que pase aquí. Tal vez Madrid dé la bienvenida y acepte a todo el que llega, no lo niego; pero siempre será una ciudad extraña, no mi ciudad. Incluso Londres fui capaz de hacerla mía, cosa que aquí no ocurre. Tengo mis lugares (poquitos) pero la ciudad no me pertenece, creo que no congeniamos.

Intimidad

Creo que cada persona necesita su propio rincón, su pedacito de privacidad. Físicamente tanto como mentalmente. Aunque sólo sea un lugar para dejar tus cosas que sea tuyo y sólo tuyo. Y lo mismo para guardar tus pensamientos. No significa ocultar nada, ni siquiera "tener secretos", no es que haya nada que esconder. Pero para ser tú mismo, a veces necesitas delimitar tu parcela.

En mi caso lo han llamado de muchas maneras, dependiendo de las circunstancias, pero es algo que necesito como el respirar para no ahogarme mezclada en un todo en el que desaparezco como persona. Podré ser individualista, antisocial, me da lo mismo. Necesito mi espacio y éste es uno de ellos. Para poder escribir lo que pienso sin mostrárselo a quienes me conocen. Y convertir algo que puede ser tan visible y estar en todas partes en un lugar privado, de los más privados. Necesito poder expresarme, hay muchas formas y una de ellas es ésta. Suena a tontería pero me siento más libre. Un diario público en el que no podré contar todo pero me permite desahogarme.

Miedo

¿Debería abandonar el barco antes de que se hunda? ¿O seguir hasta el último minuto y después ya se verá? Estoy buscando trabajo pero no de la manera más activa posible. Por otra parte tendría problemas para acudir a entrevistas ya que me paso el día aquí...

No me gusta lo que estoy haciendo ahora, que por otra parte tampoco es exactamente lo mismo para lo que me contrataron: mis funciones han evolucionado mucho pero no necesariamente a mejor, o,al menos, no más interesante para mí.

Podría quedarme en la empresa de mi jefe actual, de hecho ya me lo han propuesto. E incluso he tenido una visita de una de las chicas que trabajan ahí para comentarme (por decirlo de alguna manera) que yo tendría facilidad para encontrar otro trabajo y ella en cambio no. Si allí me moriría de monotonía y además el ambiente no es genial precisamente. Pero me asusta quedarme en el paro y mi CV no es muy tradicional, he dado demasiadas vueltas.

Tengo que hacer algo...y el plazo no es muy largo.

Es tiempo de buñuelos ;)

No tengo entradas para el SIMO

Por primera vez en varios años, voy a poder asistir al SIMO. Hasta ahora siempre se daba la casualidad que esa semana tenía que estar fuera de Madrid (normalmente por cuestiones de trabajo, y para colmo, otros congresos). Y siempre, de un lado u otro, me llegaban entradas, para que me diera más rabia. Pues bien, este año que sí estaré en Madrid, no tengo entradas. ¿Variante de la ley de Murphy?

Extraños mensajes en el contestador

No me gusta conectar el contestador del móvil, me parece muy molesto para quien me llama y no consigue localizarme: le saldrá mucho más barato mandarme un sms. Pero en cambio, quien me llama al fijo normalmente es porque está teniendo problemas para encontrarme y lo hace como último recurso, y como enviar allí un sms no es tan simple, suelo tener el contestador puesto.

Ahora resulta que mi contestador más bien parece un consultorio sentimental, pero además de personas que ni conozco ni jamás conoceré. La edad media es mayor de 60 años ( imagino que se cometen más errores, mala vista, etc.).Al menos tengo uno por semana, y eso sí, de personas diferentes, en una proporción muy alta mujeres.

Llega un momento que no sé si escucharlos o no, me parece una intromisión en la vida privada. Pero claro, es mi contestador, y hay material suficiente como para escribir un libro ( o lo habría, voy borrándolos regularmente).

Es curioso como la gente se libera hablando a una máquina, no lo hubiera pensado nunca. A mí más bien me corta y evito dejar mensaje (breve y al grano) a menos que sea verdaderamente necesario o por razones de trabajo. Pero me encuentro con la reacción opuesta; tras unos titubeos iniciales la persona se suelta y dice que cosas que tal vez no le contaría al otro de frente. Sé que esto también tiene lago de suposición y conjetura, porque no conozco a quien ha dejado ese mensaje, pero el grado de franqueza me parece impresionante. Amistades rotas, reproches de historias muy antiguas, intentos de reconciliación, disculpas por conductas que llegaron a romper relaciones. Y sobre todo, mucha soledad, llego a sentirme mal después de escuchar alguno de estos mensajes. Claro que estás también las quedadas para el bingo o el chocolate o los chismes para poner la nota de humor. O el ocasional mensaje para encargarme limpiar los cristales.

¿Debería contestar alguno para explicarles que se han equivocado y ese mensaje, tal vez tan importante lo ha recibido la persona equivocada? Llegué a hacerlo una vez, era un móvil y expliqué en un sms que había recibido un mensaje erróneo. Pero a llamar ya no me atrevo, sobre todo imaginando como se sentiría la persona que se de cuenta que me he enterado de su historia privada.

Al final Madrid es un pueblo ¿o una ciudad provinciana?

Siempre me habían hablado de las grandes ciudades como esos lugares en los que nadie conoce a su vecino, pasas completamente desapercibido en todas partes y nadie se fija en ti hagas lo que hagas. ¿Se cumple eso para Madrid?

Acabo de bajar a la farmacia, donde me han saludado, preguntado por mi jefe, por mi último resfriado, etc. Y si salgo de la farmacia y voy a la papelería o al bar de la esquina, pues tres cuartos de lo mismo (aunque afortunadamente no me preguntarían por el resfriado ¿o sí?).

Trabajo en pleno centro de Madrid, en el barrio de las Cortes, pero en la calle todo el mundo se conoce, los porteros de las casas, las tiendas, la gente de las oficinas, los vecinos... ¿ésta es la gran ciudad? ¿ o es la vida de barrio tradicional? Si casi me siento más fichada que en mi propia ciudad y mira que vengo de un lugar pequeño. ¿o es que pasé mucho tiempo en Londres, que se supone que es otra de las grandes? Pero allí los vecinos se acercaban si se quedaban sin azúcar... algo no me cuadra del todo.

En cuanto a mis vecinos de aquí, reconozco que aún no les conozco mucho, llevo meses viviendo en el edificio. La gente se saluda y de vista ya me suenan bastantes caras. 3 ó 4 veces ya me han parado para preguntarme algo sobre alguno de ellos: ¿Oye, sabes algo sobre el viejecito del tercero, el que alimentaba a los gatos? ó ¿ conoces a la señora del segundo, la del perro, sabes si está de vacaciones? Nadie se extraña de preguntar, más bien se sorprenderían si no supieras nada. Esto sí es realmente un barrio, con una gran proporción de inmigrantes y jubilados y mucha gente en la calle a cualquier hora del día.

Y la calle, ¿cuántas veces me habré encontrado ya con alguien que conozco? Parece increíble, porque no sé si habrá alguien en Madrid a quien conozca y no me haya tropezado ya por la calle. Y no es que yo tenga muchos amigos en Madrid, más bien escasos. En Zamora o Salamanca no me pasaban esas cosas.

Nadie se fija en ti... de eso ya mejor ni hablo

Misterios de las ciudades...

Un día normal

Levantarse ( y eso cuesta a veces). Paso rápido por el baño, vestirse procurando no mirar el espejo. Bajo a desayunar. Mientras caliento el agua (mi indispensable hervidora) conecto la Pda para actualizar y aprovecho para dar un vistazo al correo. Desayuno y miro alrededor para ver si hay que recoger muchas cosas. Salgo corriendo, es un paseíto hasta el metro. Cambio de línea, y como es cabecera consigo un sitio para sentarme: ya puedo sacar la Pda, leer las noticias (no hay periódicos gratis en mi estación aunque alguna vez pillo algo), organizar el día... Trabajo, trabajo, frente el ordenador hasta la hora de comer (una pausa a media mañana para café y algo más). Ahora deprisa a casa (otro viaje más en metro, intento relajarme un poco e incluso se me ocurren buenas ideas). Llego, preparo algo rápido de comer o caliento si hay comida ya lista y aprovecho para hacer limpieza, poner la lavadora, etc.. mientras engancho otra vez la Pda y puedo actualizar más. A correr al trabajo otra vez, el metro a estas horas va más vacío pero tarda más en pasar. Intento escuchar música o jugar un poquito. Llego a destino y me lanzo a la máquina de café. Más ordenador, hasta la noche. Tal vez sea tiempo de dar una vuelta o ir a comprar. O tenga una tarea de cliente misterioso. Y por fin llego a casa, es tarde, me tumbo unos minutos en el sofá. Todavía tengo que preparar la cena, quisiera mirar alguna cosa en el ordenador, jugar, leer un poquito o poner un vídeo, dependiendo del tiempo ( y desde hace poco se ha añadido pasear a wiki, mi perrito nintendogs). Hora de dormir, y me falta tiempo....

Bla, bla, bla

Jefazo máximo: Tienes que organizar una cumbre en ... (sustituir por cierto país europeo). Quiero que el primer día haya una jornada de trabajo.

Ingenua de mí: ¿Tema de la jornada de trabajo? ¿Algo sobre lo que trabajar?

Jefazo supremo: ¿Es necesario? Si crees que hace falta, inventa algo que suene bien. Te dejo bastante libre pero quiero que consigas que asista gente importante.

Trading Card Maker

Buscando como hacer un regalito a mi novio encontré esto. Ahora hasta podría hacerme yo misma las cartas que le faltan para sus colecciones, de momento intentaré construirle una especial para él ;) Lo de diseñar algo nunca se me ha dado muy bien, pero tampoco me lo han puesto nunca tan fácil. Sólo tengo que encontrar "la" foto. Y luego pensar un texto... pero me gusta la idea.

Llega el invierno

Y con él los chocolates calentitos. Los de Dunkin sí me conocen: después de pasarme el verano alimentándome de granizados verdes o rosas con donuts arco-iris, ahora me seducen con estos chocolates, ¿conseguiré ponerme a dieta con estas tentaciones? De momento intento dar un paseo de una hora por cada capricho que me como, espero que el tiempo me lo siga permitiendo.

Tratando de abrir la puerta de la oficina con el abono del metro...

Son los efectos encadenados de la lluvia4 malas canalizaciones4 inundaciones 4pies empapados 4 resfriado. Creo que lo primero que pierdo una vez que la fiebre hace acto de aparición ( con sus hermanitos dolor de cabeza, garganta y escalofríos) es la capacidad multi-tarea (esa que dudo muchos hombres posean). Así que hoy trabajo lenta, lentísima (y expuesta a cometer múltiples errores).

Por otro lado, la situación en el trabajo se ha "solucionado" con un parchecito, por lo que en teoría ya no debería preocuparme como hasta ahora por conocer la fecha de caducidad de mis quehaceres. Esto ya no se hunde (de momento) y han llegado a un acuerdo para seguir adelante y no quemar la nave ( y quedarse sin despojos). Claro que el acuerdo es muy precario y puede romperse en cualquier momento y además las paces durarán como máximo un año.

Me siento muy extraña, desorientada, me había acostumbrado a vivir sin saber que iba a ocurrir al día siguiente, y cuesta volver a la normalidad. Tengo que aterrizar rápido porque todos los proyectos paralizados tienen que arrancar ya otra vez y sin embargo, sobre todo los que son a más largo plazo, no puedo tener la confianza en que realmente servirán para algo o irán a la basura directamente dentro de unos meses.

Así que ahora vuelta a trabajar duro sin intentar pensar mucho en el futuro.

La cacharritos de la oficina

Esta mañana venía pensando en el metro en los encarguitos que tenía para este finde ( y llegué y leí este post) Me iré a Salamanca con mis padres que están de mudanza que además coincide la gran Cumbre que debe hacer que la ciudad parezca una Madrid chiquitita y malhumorada. Pues de todas formas me han dejado un portátil y una PDA con su GPS para que les eche un vistazo.

No es que me moleste, al revés, me encanta cacharrear con todo lo que se me pone por delante, aunque cuando te llega alguien y te dice que te lleva a su casa en un ratito para que le formatees el ordenador/ le quites algún virus/ le mires la conexión a internet (creo que estas 3 son las más buscadas, al menos en mi caso) y comienza a contarte que sólo vive a 50 minutos, que enseguida te trae de vuelta a casa, etc... te dan ganas de decirle que tú también necesitas un carpintero, fontanero, electricista gratis (y es verdad, necesito voluntarios, pero nadie se ofrece al intercambio)

A lo mejor si me hubiera dedicado a la informática, estaría harta de hacerlo todo el día ¿los cocineros cocinan en casa?, pero es que también la informática es demasiado amplia y no es lo mismo dedicarse a programar que a instalar redes por ejemplo. Podría pasarme el día entero con un ordenador y no saber ni cómo es un disco duro (bueno, creo que hay quien no sabe ni qué es un disco duro) pero soy de las que empezaron con Spectrums, Commodores y Amigas, así que un gran trecho ya lo tengo recorrido.

Y considero una suerte que todo lo que yo no me puedo comprar lo pueda tocar, configurar, probar... me siento casi como testeadora oficial (aunque a veces también me da envidia, todo hay que decirlo)

Así que esta noche me subiré al autocar con un portátil,la PDa prestada, mi Pda, mi nintendo... la alegría de cualquier ladrón

Efecto imán

Siempre me he preguntado si los locos tiene un sexto sentido especial para detectar a otros locos. O tal vez no exactamente a otros locos pero a algún tipo de personalidad en concreto. Porque siempre he sentido que tengo un imán especial para atraerlos. Si viviendo en una ciudad pequeña me bastaba tener que esperar unos pocos minutos por alguna amiga que se retrasaba en alguna esquina o incluso en la Plaza Mayor, para tener ya a alguien al lado y de paso avergonzar a mis amigas cuando llegaban (porque suele ser la mejorcita fauna la que se me acerca siempre), en Madrid no han cambiado mucho las cosas. Ya sea en el metro, en el banco del parque, o cualquier lugar de la calle. ¿Tengo algo especial? ¿Alguna señal que emita en una frecuencia desconocida por mí? Esta mediodía me senté en el jardín de la estación Atocha (que recomiendo a los amantes de la humedad y las tortugas..) y nada más abrir el periódico ya tenía mi primer visitante: chico de unos 25 años, recién bajado del AVE según su versión (eso sí, sin ni siquiera una pequeña mochila) y que en poco más de 5 minutos me contó su vida:

-¿Te molesto?
( Tú que crees, hasta me has asustado)
- Me gusta este sitio, me acabo de bajar del AVE y lo he visto tan tranquilo
(hasta que tú llegaste)
-No soy de Madrid.... y etc. , etc.

¿Por qué a mí? ¿Y por qué siempre? La estación estaba llena, había muchas posibles víctimas.Tampoco creo llamar mucho la atención. Si alguien sabe la respuesta...(y no me vale que le pasa a todo el mundo de vez en cuando, a mí me pasa todos los días, hasta puedo apostar los minutos que tardará en acercarseme alguien como esté sola en cualquier lugar, en cualquier país)

Fin de semana de derroche total

Examinando mi cuenta en el banco,parece que he decidido gastarme el sueldo nada más cobrarlo. Este fin de semana me he quedado en Madrid y ha resultado una experiencia peligrosa para mi bolsillo:

1. Funda para la PDA: después de 2 caídas ya no podía arriesgar más, la bolsita que viene con mi N50 es muy mona para protegerla del polvo pero nadie me ha confirmado que mi criatura haya sido un gato en una vida anterior. Después de intentar conseguir una funda universal sin suerte y renunciar a hacer un pedido a Hong Kong, me he tenido que conformar con la versión oficial, a precios oficiales... Ahora espero que no se me rompa el puntero porque no trago...

2. DVD. Problemas con la tarjeta de sonido y muy pocas ganas de formatear(sí, lo tendré que hacer, pero me da mucha pereza). Un paseíto por la FNAC (mi segunda casa) y siempre hay alguna tentación que te resuelve el problema a buen precio. Ahora ya puedo ver pelis por las noches otra vez, tumbarme en el sofá y quedarme dormida...

3. Y por supuesto... Nintendogs... Me cansaré, me aburriré, lo dejaré tirado, pero creo que es un juego para tener y experimentar: son formas nuevas de jugar y no tengo intención de perdérmelo. Además los perritos son muy graciosos. Necesito nombres urgentemente.. Para dejar de secuestrarle la consola a mi novio cada vez que mi gameboy se quedaba sin batería me compré el pack azul (el rosa ya era superior a mis fuerzas): ¿llegarán a crear algún artilugio designado para chicas que no sea rosa?. Ese día seré feliz

Si además añadimos una visita al Salón del Chocolate con efectos muy peligrosos y a largo plazo, llego a la conclusión que el riesgo de quedarme en el paro más que volverme ahorradora ha excitado mis glándulas consumistas (o que a mi estado de tensión he aplicado una terapia de centro comercial)

Sandwichera de Hello Kitty

Hoy me está persiguiendo por todas partes xataka tecnochica pero ¡la quiero! Navegando encontré también una tostadora (¿servirá como excusa que la mía está muy vieja?) . Las dos (tostadora y sandwichera) se pueden ver y comprar aquí (blogger se ha puesto pesado y no me deja subir la foto)

Me encantan los sandwiches calentitos para cenar (y seguro que éstos se los comía hasta mi sobrina)

Ya tengo mi catálogo IKEA

Siempre me pasan cosas en el metro, por alguna razón soy de ese tipo de personas que atraen a locos y fauna diversa: la gente me habla en el metro, o como hoy (ayer) me regala el catálogo Ikea. Supongo que lo estaba mirando con ganas, porque tengo que ir completando mi casita poco a poco y como soy "tan moderna" vivo en una especie de miniloft con muebles Ikea casi 100%. Suena muy bien, sobre todo cuando cuento que tengo 3 pisos (sí, es cierto) y vivo en el centro de Madrid. Podría poner un anuncio genial en una inmobiliaria: loft de diseño, reformado...Quien haya ido a la caza de algún lugar para vivir en Madrid recientemente ya sabrá leer entre líneas. Esto era un antiguo "super" que reformaron y convirtieron en vivienda. Todo quedó bastante bonito (aunque claro, más aparente que de buena calidad), listo para venderlo al primer desesperado como yo que necesitara un sitio para vivir a un precio módico (que los bancos no avalan fácilmente a una chica sola con un sueldo medianillo. Pero este piso tenía cocina de verdad y bañera (lujos imprescindibles para mí) e incluso espacio para guardar todo lo que me gusta acumular: mi novio dice que ando rozando el síndrome de Diógenes). No es cierto, pero sí es verdad que tengo muchos libros, CDs, colecciones de sellos, postales.... todo lo que no cabe en una minicasa y que aquí con un sótano puedo guardar. Así que me la quedé y poco a poco la voy amueblando a base de visitas al Ikea y maratonianas sentadas de montaje de muebles. Ya hablaré otro día de mi escaso talento como decoradora, de mis meteduras de pata y mis prioridades (también la búsqueda de mi rinconcito particular)

Almodovar rodando en mi calle...

...Esta noche, ¿me apunto de extra? Como estoy al borde de un ataque de nervios y me acabo de comprar un bote de vitaminas tal vez sea la indicada.

Fast food treats

Caprichos de chocolate a unos céntimos.

1. Chocomac. Simple pero delicioso
2. Muffin de chocolate McDonalds. Siempre voy a la caza de muffins y éstas son mejores que muchos de sitios bastante más caros y de "supuesta" calidad.


Un poquito más caro (y no llega a 1 euro, tampoco es una barbaridad): Dunkin Donuts

Demasiado cansada para pensar en títulos

Estos días tengo demasiado tiempo libre en el trabajo, lo que se traduce en mayor fatiga. Ni siquiera puedo ordenar mis ideas para explicar lo que quiero decir, pero la combinación de tensión, nervios,incertidumbre y tiempo libre desaprovechado y perdido es letal.

En una jornada normal de trabajo no estaría escribiendo en estos momentos, tendría bastantes cosas que hacer y tal vez hiciera una pausa para consultar algo o mirar mi correo o tomar café, pero desde luego no me pondría a escribir. Unos minutos para descansar son buenos, relajan y te ayudan a concentrarte más en la siguiente tarea, pero al revés no funciona del todo bien, al menos para mí. La otra opción sería no hacer nada de nada, y quedarme mirando a las musarañas; no me acaba de convencer del todo y de cara a las visitas sería poco menos que desastrosa (aunque a las alturas que estamos, no sé realmente a quién le importa eso)

La situación es la siguiente: hay una crisis muy grave y por razones de tipo "político" ésto en lo que estoy metida probablemente desaparecerá. Si ese probablemente no existiera, si hubiera una fecha, si todo estuviera claro y decidido, al menos las soluciones serían fáciles. Pero tal y como están las cosas tengo que continuar, paralizando todos los proyectos, sin poder crear uno nuevo pero tampoco dejar que mueran "por si acaso", un filo en el que me muevo todos los días, y que me deja de brazos cruzados como si fuera una estatua. Mi principal cometido en estos momentos es escuchar y analizar lo que me cuentan, para devolverlo racionalizado, masticado y , si es posible, con el menor veneno posible. Son horas y horas de escuchar y calmar ánimos, mostrarme fría, tranquila y racional, porque mientras yo me estoy jugando simplemente mi puesto de trabajo, otros han puesto sobre la mesa cargos, mucho dinero, y hasta algún título de "ilustrísimo" muy anhelado.

Y como estamos en España, aunque gran parte del día no tengo nada que hacer, las reuniones se convocan después de largas horas de trabajo (cuando no esas comidas pesadas y maratonianas en las que echo tanto de menos mi oficina). Como persona "de confianza", tengo que asistir, ser testigo de lo que está ocurriendo.

Es viernes, viernes por la tarde, y después de una semana en la que cada día que pasaba dormía menos y me encontraba con algún problema más al empezar la jornada, querría descansar. Todo el mundo me ve tranquila y relajada, diseccionando los datos, las traiciones, intrigas, luchas internas. Pero no soy una máquina. Y no puedo más.

Sólo apto para golosos

Mirando las entradas de este blog, parece que sólo pienso en comida. O que estoy intentando ponerme a dieta sin ningún resultado ( y eso que de verdad lo necesito, mis pantalones me lo dicen todas las mañanas, mi novio alguna que otra vez al día)

En fin, el año pasado visité el Salón del Chocolate, y me acabo de enterar que repiten. No es que sea perfecto, podrían organizarlo mucho mejor y en un lugar más apropiado (sólo hace falta ver la página web, se supone que es para apuntarse a las actividades y catas y lo deja en un próximamente...¡Si queda una semana!)

Lo único que puedo prometer es que hay chocolate, y del bueno, por todas partes. Para comer, beber, untarse la piel, tocar, oler.... el paraíso de los chocolate-adictos (me incluyo). Si alguien quiere además maquillaje de chocolate, velas de chocolate o cualquier artilugio extraño, no quedará decepcionado.

También había bastantes actividades, cursos, charlas... pero ya he dicho que el lugar no creo que sea el mejor: los pasillos de un centro comercial. Si además unimos una multitud de jubilados (aquello parecía una excursión del Inserso) más los correpondientes grupos de familias con niños, llegar a alguno de los stands era tarea casi imposible, sobre todo si regalaban algo (el anuncio de cervezas en el que sale lo mucho que nos gustan las degustaciones gratuitas es para mí el anuncio del año, y yo la primera en sentirme identificada) ¿qué cerveza era, por cierto?

Volveré, volveré. Ya buscaré una hora más tranquila, estudiaré como evitar las multitudes y me aprenderé de antemano las zonas que quiero visitar para preparar una estrategia (si es que la web deciden en algún momento hacerla informativa). Compré en una pastelería asturiana unos pastelillos que quiero repetir...(creo que aún no he olvidado la mousse deshaciendose en mi boca lentamente)

Por si alguien quiere acercarse, el salón se celebra la próxima semana, del 29 al 4, en el centro comercial Moda Shopping de Madrid aquí

La hora del café

A lo mejor porque el viernes la reunión fue dura y larga y no hubo tiempo ni de pensar ni de tomar café, lo cierto es que estuve pensando en ese café en algunos de esos ratos en que todo el mundo se dedicaba a tirarse los trastos a la cabeza mientras lo que yo deseaba era estar a millas de distancia.

He trabajado en varias empresas ya, y cada ritual de café ha sido diferente. Desde el bar de la esquina y la gente que baja en grupitos a determinadas horas (y esas alianzas o rituales que se forman) a la máquina de centimitos con sus corrillos. También el café que te llevas a tu mesa o el que te tomas de pie, en un rincón dedicado a ello y del que no te atreverías a salir por no romper la tradición.

Aquí no, la hora del café suele ser sagrada (aunque no fija ni mucho menos), y nos sentamos todos alrededor de una mesa con algo de comida, más bien bastante copiosa: tostadas, pastas, pasteles, queso, jamón... y lo que pueda caer ese día (suena festín, ¿ verdad?). Alguien (por supuesto ninguno de los jefes, que no saben ni como tocar la máquina) prepara para todos (y ahí ya entramos en las peculiaridades de cada uno, porque cada café es diferente, y llevará su dosis exacta de leche , café, descafeinados, etc.) y llega la hora del cotilleo, el mejor momento para ponerte al día de lo que está sucediendo en cada departamento, pero teniendo en cuenta que no falta casi nadie (salvo un par de excepciones) por lo que la autocensura también funciona.



Pero a lo que iba también, el café es buenísimo, tenemos una máquina Nespresso que usa unas pastillitas tipo platillo volante de colorines: verde café solo, rojo descafeinado, marrón café americano... y así una veintena. Es muy fácil de hacer (basta meter la pastilla), limpio, y además sabe de maravilla. Ya me gustaría tenerla en casa, pero algún defecto tenía que tener: es cara cara. Si algún día acierto esa quiniela...

No me pude resistir...

No me pude resistir a copiarlo.... lo robé de aquí

En el metro...

Ayer en el metro, un par de chicos de pie a mi lado: "Pues será tonta, tiene una PDA y la usa para jugar". Pues sí, para jugar y para otras muchas cosas. Y esa es la ventaja de una PDA, puedes hacer casi todo lo que se te ocurra en ese momento. Echar un vistazo a las noticias, repasar algún documento, leer un libro, ver una película, escuchar música, mirar el correo, repasar tus cuentas a ver en que te has gastado tu dinero, postear aquí... Y por supuesto, jugar. El que tenga largas jornadas de viaje al trabajo sabrá lo que da de sí el tiempo y lo bueno que es relajarse de vez en cuando. Aunque ya sé que hay quien jamás ha hecho un solitario ni sabe lo que es el buscaminas, y por supuesto no se le ocurriría jugar en público a un juego de rol o un RPG.

Largo fin de semana

Fin de semana de puente en Valladolid. Ferias, casetas con pinchos y bebidas por toda la ciudad: necesito urgentemente ponerme a dieta después de todo lo que he probado. Ronda de casetas por la mañana, a lo mejor otra a la hora de la comida, por la tarde para dar una vueltecita, el tapeo nocturno....Díficil resistirse cuando todos los bares compiten con sus mejores galas de cocina (y a 2 euros tapa+bebida). He perdido la cuenta de lo que he probado, arroces, croquetas, gulas y gambas, varias tartas, minibocatines variados, más dulces.... creo que ensaladas no ( y es lo que hubiera necesitado). Muchísima gente por la calle a todas horas y como mi hermana y mi novio viven en extremos opuestos de la ciudad, quedé atrapada varias veces intentando cruzar las multitudes. En fin, que paseos también me he dado unos cuantos. ¡ Y con zapatos nuevos!

Una de las noches fuimos al cine, a la sesión de madrugada: los amigos de mi novio me dejaron elegir película y no creo que vuelvan a hacerlo: desde que la vi anunciada, quería ir a ver la "Guía del Autoestopista Galáctico" aunque estaba claro que tenía que ser una película "rara", que no le gustase a todo el mundo, y tampoco es tan fácil capturar un libro así. No puedo decir que haya sido la película de mi vida, pero tampoco me ha decepcionado. ¿La recomendaría? Sí, pero a determinadas personas. ¿Recomendarías Mundodisco? Pues normalmente sabes a quien le va a gustar y a quien no.

Trabajo aburrido el de hoy, y para comer tengo comprador misterioso McDonalds, lo que significa que la dieta no puede empezar hoy. Además el desayuno en la oficina hoy ha incluido salmón, queso azul y hojaldres. A veces creo que se gastan más en desayunos que en mi sueldo y hoy es uno de esos días en que me dan la razón. Y por si a alguien le da envidia, la máquina de café es una maravilla (tentaciones aquí hay muchas, no sólo internet)

Semana rara

Extraña esta fiesta de mañana en Madrid; han pasado tan pocos días además desd el final de las vacaciones que altera aún más el ritmo (aunque no tengo ninguna intención de quejarme, mis jefe ha lanzado ya suficientes rayos y centellas sobre lo poco que se trabaja en España y por lo tanto,lo poco que se produce, tal vez podía él dar ejemplo y a lo mejor nos inspiraba).

En fin, cuando salga de trabajar me marcharé a Valladolid (donde hoy es fiesta, caprichos del calendario) y mañana cuidaré a mi sobrina (o sea , haré de canguro para padres trabajadores que tienen que solucionar el problema de alguna manera). Y sí, eso sí me gusta. Seguiré enganchándola a la Gameboy y me la llevaré de paseo para que veamos las casetas de Valladolid ( feria de pinchos y tapas deliciosas siempre)

Cambios de humor e imagen

La noche anterior llegaba a casa algo deprimida, sin ganas de nada, no había sido el mejor de los días ni parecía que fuera a mejorar mucho. Al pasarme por Infojobs, vi que estaba en proceso (que no finalista ni mucho menos) en uno de los trabajos a los que me había apuntado en los últimos días. Si no hubiera sido ya de noche, diría que de repente el sol empezó a brillar. Tal vez sea muy poquita cosa, pero el ver que por una vez alguien cree que puedes servir o por lo menos no descartarte automáticamente para algo que realmente es lo tuyo, te gusta y además sabes hacer, aunque tu curriculum no sea el más tradicional; ese pequeño gesto puede subirte la moral y devolverte a la tierra.

Y, consecuencia directa, visita a la peluquería y cambio de imagen: corte de pelo (¿quién no lo habrá hecho alguna vez?) Intentar cambiar el exterior, tu exterior, cuando te sientes mal por dentro tratas de luchar por mejorarlo. Es decir, un mal día: solución, peluquería (o tarde de compras). Subir la autoestima como sea (especialmente librándose del pelo-paja)

PD Al día siguiente en el trabajo todo el mundo comentó mis zapatos nuevos, nadie se fijó en mi pelo.

PD2 Y estaba en proceso en otro trabajo más, también interesante.

De trackbacks y otros

Sigo investigando... he añadido Haloscan para poder hacer trackback siguiendo unas instrucciones muy sencillitas que encontre aquí, pero como también se ocupa de los comentarios... pues otra vez me ha dejado sin ellos ains!

Pizzas que parecen helados

Lo leí hace unos días y tengo un capricho... unas pizzas muy originales, espero ir a probarlas pronto.

Completando: están aquí en Madrid en La Esquina del Bernabéu (el centro comercial), una excusa para acercarse al campo...; también parece que han abierto en Benalmádena y tienen planeado hacerlo en Valladolid. La página es http://www.konopizza.com/ y tiene unas fotos que me convencen para saltarme la dieta ( qué débil soy)

Novatadas varias

Como todos los principios... de repente ha desaparecido mi lista de enlaces y la página de blogrolling me da error. Todavía no he descubierto si el fallo es mío o tienen ellos algún problema en este momento. Además el viernes borré accidentalmente un post que por desgracia tenía un comentario. A través de ensayo y error acabaré aprendiendo, mientras tanto disculpas sobre todo a la persona que me hiciera el comentario: no era mi intención! ( ni siquiera pude llegar a leerlo)

Después del fin de semana en Salamanca ( en fiestas :) ) la vuelta al trabajo se hace un poquito más dura. Ni siquiera tengo el consuelo de algún plan interesante para hoy, así que sospecho que si no cambian las cosas me engancharé a jugar al Héroes a falta de mejor cosa que hacer ( esta semanita sola lo voy a notar)

domingo en carretera

Ayer en la biblioteca saqué la PDA para tomar notas de una revista; se me acercó una señora ya mayor bastante interesada en saber qué era "aquel aparato extraño" y para qué servía. Se lo estuve explicando y le gustó mucho : tal vez haya logrado una nueva conversa. Mi pikita no llamaba tanto la atención desde el día en el metro en el que dos chicos comentaban a mi lado lo fácil que sería robarmela y en que podrían usarla ellos.

y ahora... camino de Salamanca en unos minutos

Aunque lo que más me apetece es dormir

Esperando el nuevo disco de Sabina

Alivio de luto es ya, creo, el título definitivo. Hoy he estado buscando datos ( a falta de música), pero he encontrado fragamentos de letras, versos sueltos, (algunos) títulos de canciones, poco más. y a falta poco...

¡Vaya día!

¿ Sensación de correr a todas partes sin poder ya frenar? Día de locos en el trabajo con un artículo para la revista que tengo que acabar y corregir urgentemente, informe y cuestionario que llegan a última hora y que tuve que traducir a la carrera, para pasarselo a los chicos y además explicarles un poco lo que quería el cliente....Como tenía que irme corriendo a comer, sonó el teléfono a la hora de la salida... 15 minutos menos para mi pequeña maratón: viajecito a Plaza de Castilla para hacer de cliente misterioso, carrera hasta casa donde me esperaban mis padres y el electricista (todo se junta el mismo día: Ley de Murphy) , rápidamente recoger documentación de mi niño para pasarla por fax porque le han cogido para un trabajo bastante interesante y vuelta al trabajo. Todo esto en.. minutos. ( se admiten apuestas) Ah, se me olvidaba .. si tenía que comer, otro día será. Que además me esperan varias cositas que se acumularon con las urgencias de la mañana. Cuando salga, a casita a coger una bolsa con lo que pille y carretera adelante rumbo al atasco de la A6 de los fines de semana: destino Salamanca, andén de los sueños.

Y después de esta pausa atacaré la máquina de café y a seguir trabajando.

Probando diarist y otros... (me quedo con avantblog)

Llevo todo el día probando diferentes formas de postear desde la PDA offline y de momento no hay ninguna que me convenza: yo quería actualizar esta página en los largos viajes de metro y no sé si lo conseguiré. De momento lo único que me funciona (y con algún problemilla) es el canal avantblog. Supongo que en lugar de leer y buscar cosas sober blogs sería mejor que directamente posteara pero tampoco quiero hacerlo al azar. Ya he visto que desde aquí no se pueden mantener categorías o al menos no hay un modo fácil, y a mí me gustaría escribir sobre libros , escritores, lugares de Madrid, Salamanca, etc. y mantenerlo con algún orden. En fin, ya aprenderé. Que lo quiero todo desde el primer día y estoy sólo empezando. También echo mucho de menos mi teléfono (el que me robaron), un T630 con cámara y bluetooth para poder añadir alguna foto en lugar de meter tanto rollo

desde la pda...

Veamos que tal queda esto..

Llevo días con ganas de empezar algo así aunque ni siquiera aún sé como voy a hacerlo. Tengo muy mala memoria y lo que quiero es dejar guardadas de alguna forma todas esas pequeñas cosas, esos detalles que al final siempre se me escapan pero que van formando mi vida.

Supongo que debería empezar por presentarme aunque me suene muy raro contarme a mí misma quién soy. Zamorana, que vive en Madrid, después de haber dado muchas vueltas ( Salamanca, Londres, un paréntesis en Alemania...). Ahora mismo trabajo de secretaria (no es que me apasione especialmente pero al menos me da para vivir)

Y ¿ qué es lo que me gusta? Ordenadores, mi PDA, leer, viajar...